El Partido Popular solicitó la semana pasada personarse en la llamada causa de los hidrocarburos, pieza separada del caso Koldo que destapó un fraude de 182 millones de euros por el que el juez Santiago Pedraz, encargado del juzgado nº5 de la Audiencia Nacional, envió a prisión a Víctor de Aldama. A la espera de que el magistrado decida sobre la petición de los de Feijóo, en el partido auguran que podría provocar la caída de Sánchez, "el señor uno de la trama".
El motivo por el que decidieron presentar su querella en este mismo juzgado, y ante el mismo juez, es porque están convencidos de que la posible llegada de bolsas de basura a Ferraz está ligada con la investigación que ya está en curso. Uno de los implicados sería el confidente anónimo que reveló cómo llevó pagos en efectivo a la sede del PSOE en Madrid. Convencido de que Pedraz le investiga, el PP cree que podría estar hablando para llegar a un acuerdo con la Fiscalía, y que rebaje su posible pena a cambio de facilitar información.
"Sabemos de quién se trata, lo sabe el Gobierno y lo sabe el juez", aseguran fuentes del partido, que dan a este testimonio mucha credibilidad porque no sólo conocen su nombre, sino porque el implicado asume en primera persona la comisión de un posible delito, en lugar de señalar a un tercero, como cabría esperar.
El papel de ¿los testaferros?
El PP cree que la causa de los hidrocarburos será clave para arrojar luz sobre el verdadero papel de Pedro Sánchez en todo el entramado que salpica a personas de su máxima confianza, como lo fue José Luis Ábalos. "Apenas se han volcado unos pocos móviles y ya sabemos conversaciones que señalan a Armengol, a Marlaska, a Torres…, es sólo el principio", aseguran fuentes del partido sobre el informe de la UCO, relativo al resto de causas en curso, como la de Begoña Gómez y Koldo.
El partido ha pedido personarse en la causa, convencidos de que será la que haga caer a Pedro Sánchez.
El asunto de los hidrocarburos ha pasado algo más desapercibido en los medios, pero el PP le da máxima prioridad por la elevada cuantía del fraude cometido, y que hace sospechar que hay implicados de máximo nivel. Es por ello que van a volcarse en este asunto para obtener todos los datos posibles, especialmente sobre los casi 70 millones de euros que los implicados transfirieron al extranjero, cuyos beneficiarios podrían no ser ellos al estar ejerciendo, quizá, de meros testaferros de la trama.
¿Para quién actuaban? ¿Para Ábalos? ¿para alguien más? ¿Para quién son esos 70 millones de euros? ¿Quién daba las órdenes de actuar? ¿Qué información aparece en los ordenadores encriptados? ¿Qué datos hay en los móviles que todavía no se han volcado? Son sólo algunos de los interrogantes que se hacen el PP, donde hablan abiertamente "del señor uno de la trama", como hizo la semana pasada Feijóo cuando interpeló a Pedro Sánchez en la sesión de control del Congreso.
El punto de no retorno
El presidente del PP, asegura que "se acabará sabiendo todo" porque los implicados irán cantando, auguró que esto es sólo la punta del iceberg. "Esto, en mi opinión, no ha hecho más que empezar y, por tanto, el presidente del Gobierno está en un punto de no retorno". Para Feijóo "hay dos tipos de corrupción: la de las comisiones ilegales y la de la instrumentalización de las instituciones; Pedro Sánchez criticaba las dos en 2017, ahora usa las dos de forma simultánea", denunció.
En el entorno de Sánchez ya están imputados su mujer, su hermano, su exnúmero dos y su fiscal. El cerco se estrecha cada vez más sobre el presidente, acosado por los casos de corrupción que, según el PP, ya empiezan a hacer mella también en sus propias bases, especialmente en las federaciones territoriales, donde no pueden comparecer ante la opinión pública sin tener que someterse a preguntas relacionadas asuntos nacionales.
De ahí se explica, en parte, la rebelión de algunos miembros del PSOE, que acusan el permanente señalamiento por causas que afectan a sus jefes. Incapaces de vender sus propios logros a nivel municipal o autonómico, sin poder colocar ningún mensaje, los socialistas se ven forzados siempre a reaccionar a la marea de noticias relacionadas con Begoña Gómez, David Sánchez, Álvaro García Ortiz o José Luis Ábalos, lo que está resquebrajando incluso la férrea unidad que giraba en torno al presidente del Gobierno.
Fuente: Libertad Digital
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